
La administración Trump ha iniciado una investigación formal sobre el uso de la Universidad de Harvard del Programa de Visitantes de Exchange J-1, un desafío directo a una de las categorías de visas más grandes y más utilizadas de Estados Unidos para el intercambio académico y cultural.
¿Qué es el Programa de Visas J-1 y por qué es importante?
El Programa de Visitantes de Exchange J-1 ofrece aproximadamente 300.000 visitantes extranjeros a los Estados Unidos anualmente, desde más de 200 países y territorios. Los participantes incluyen:
- Académicos visitantes e investigadores postdoctorales
- Estudiantes universitarios y pasantes
- Médicos en formación médica
- Consejeros de campamento y au pairs
Para los empleadores y las instituciones anfitrionas, los participantes de la J-1 cumplen funciones esenciales en investigación, cuidado infantil, trabajo estacional y educación intercultural. Estos programas están diseñados no solo para desarrollar habilidades, sino también para fomentar la buena voluntad mundial, una piedra angular del poder blando de los Estados Unidos.
Hemos guiado a los empleadores a través de cada cambio migratorio importante, y este no es diferente. Simplifique su programa de inmigración con Boundless. Más información.
Por qué esto es importante para los empleadores, las universidades y las familias anfitrionas
El talento y la innovación están en riesgo
Los académicos internacionales ahora se conforman 26% de la fuerza laboral STEM de Estados Unidos. Aproximadamente 35.000 investigadores postdoctorales en Estados Unidos son extranjeros con visas temporales, muchas de ellas J-1. Limitar estas visas podría estancar la innovación en todos los sectores, desde la biotecnología hasta la ciencia del clima.
El efecto ondulador económico es real
Los estudiantes y académicos internacionales contribuyeron con casi $43.8 mil millones a la economía de los Estados Unidos en 2023—2024, apoyando más de 378,000 empleos en vivienda, alimentos, transporte y venta minorista. según a NAFSA: Asociación de Educadores Internacionales.
Familias podrían perder acceso a cuidado infantil asequible
Cerca de 20.000 au pairs vienen a los Estados Unidos con visas J-1 cada año, la mayoría mujeres, proporcionando cuidado infantil mientras se realizan intercambios culturales.
Lo que está pasando en Harvard podría ser un adelanto de lo que sigue
Patrocinadores de Harvard más de 7.000 individuos en todas las categorías de visas F-1 y J-1, alrededor del 26% de su cuerpo estudiantil. Si bien el gobierno históricamente ha investigado escuelas por fraude de visas (por ejemplo, “fábricas de grados”), la investigación sobre Harvard no está vinculada a ninguna mala conducta específica.
Esto sigue a una serie de acciones recientes:
- Revocar la certificación SEVP de Harvard (temporalmente bloqueada por un juez)
- Suspensión de becas de investigación
- Eigen imágenes de vigilancia de las protestas en el campus
- Amenaza con la revocación de visas bajo una proclamación dirigida a la “influencia extranjera”
{{cta-component-horizontal-aligned}}
Ex oficial de USCIS desglosa los riesgos para los empleadores
El escrutinio de las visas J-1, particularmente en instituciones de élite como Harvard, es parte de un cambio más amplio en la política estadounidense que comenzó durante la primera administración Trump, dice Erik Finch, director de operaciones globales de Boundless y ex oficial de USCIS. Según Finch, el enfoque ha tratado cada vez más a la inmigración como una herramienta de apalancamiento de la política exterior, particularmente con respecto a China.
1. La política de visas como palanca de política exterior
Las acciones contra las visas J-1, especialmente dirigidas a ciudadanos chinos, son parte de un enfoque coordinado de “todo el gobierno” que trata el sistema de visas como palanca en la competencia geopolítica entre Estados Unidos y China, dice Finch.
- Esto ha incluido restricciones de visa para estudiantes chinos y una mayor investigación de las categorías de visas vinculadas a campos de investigación sensibles, como la inteligencia artificial y la computación cuántica.
2. Iniciativa China del FBI y mayor escrutinio
La “Iniciativa China” del FBI (lanzada en 2018) condujo a una ola de investigaciones en investigadores, muchos de ascendencia china, centrándose en afiliaciones no declaradas con instituciones extranjeras. Los estudiosos J-1 en los campos STEM han sido frecuentemente atrapados en la mira.
3. Institutos Confucio y personal de visas J-1
Las agencias gubernamentales de Estados Unidos, incluido el Departamento de Estado y los miembros del Congreso, han escrutinio Los Institutos Confucio, a menudo atendido por ciudadanos chinos con visas J-1, por preocupaciones sobre el espionaje y la propaganda del gobierno chino. Aunque la mayoría de las investigaciones no encontraron actividad delictiva, alimentaron los temores y endurecieron la supervisión de visas.
4. Uso político de SEVIS y presión diplomática
Históricamente, las sanciones de SEVIS se usaban solo en casos de fraude como “molinos de grado”, dice Finch. Ahora, parece que el gobierno está aprovechando las revocaciones de SEVIS y las demandas de registros con fines políticos, como por ejemplo, obligando a las universidades a cumplir con las demandas de políticas. En el caso de Harvard, la revocación fue detenido por orden judicial, pero la medida estableció un nuevo estándar preocupante.
“El gobierno normalmente reserva las revocaciones de SEVIS para un fraude directo”, dice Finch. “Lo que estamos viendo ahora —usar estos poderes para extraer concesiones políticas— no tiene precedentes”.
En la decisión judicial se reconoció que si bien existe la autoridad del SEVIS, el Departamento de Estado conserva el derecho de investigar el cumplimiento de las reglas del programa de intercambio.
Lo que sigue y lo que los empleadores deben ver
Si bien Harvard es el caso de más alto perfil, este cambio podría tener efectos en otras universidades, familias anfitrionas y empleadores. Puntos clave:
- Espere un mayor escrutinio de las instituciones que patrocinan a los titulares de visas J-1, especialmente si son percibidos como polémicos política o culturalmente.
- Prepárese para la incertidumbre: las aprobaciones de visas, las renovaciones de programas y la documentación de cumplimiento pueden enfrentar nuevos obstáculos, incluso para empleadores y anfitriones que actúen de buena fe.
- Apoye a los titulares de su visa: ya sea un au pair, un pasante o un investigador, asegúrese de que los participantes se sientan seguros, informados y facultados para hablar sobre sus derechos.
“Se trata de algo más que visas”, dijo Finch. “Se trata de si Estados Unidos sigue dando la bienvenida al talento global, o si estamos cerrando nuestras puertas a las personas que nos ayudan a crecer”.
{{cta-component-center-aligned}}
.png)
.png)
.png)






.avif)