
Estados Unidos es más diverso racial y étnicamente que nunca, según un nuevo informe.
Más del 96% de todos los condados en los Estados Unidos vieron un aumento en su diversidad de población de 2010 a 2020, encontró el informe del grupo de defensa de la inmigración New American Economy, que examinó datos del censo de 2020. Los investigadores analizaron el Índice de Diversidad (DI) de la Oficina del Censo, una herramienta que calcula aumentos en la diversidad al mostrar la probabilidad de que dos residentes en un área determinada sean de diferentes razas o etnias. Al comparar los puntajes entre 2010 y 2020 se muestra qué condados se han diversificado más.
Los 10 principales condados que experimentaron los mayores aumentos en la diversidad de población se ubicaron en Dakota del Norte, Dakota del Sur, Georgia, Nebraska, California, Texas, Pensilvania y Arkansas.
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Muchos condados que vieron el mayor crecimiento en diversidad fueron pequeñas comunidades rurales que eran casi en su totalidad blancas hace apenas 10 años. El condado de Williams en Dakota del Norte, que vio el mayor aumento en la diversidad, duplicó con creces su puntaje DI entre las dos fechas del censo, y ahora cuenta a uno de cada cuatro residentes como hispano o no blanco. El informe acredita el aumento a la “floreciente industria petrolera” de la zona.
En el condado de Forsyth, Georgia, una población asiática en rápido crecimiento aumentó la puntuación DI del condado de 34.2% en 2010 a 55.2% en 2020. Según el informe, los residentes asiáticos ahora representan el 18% de la población, frente al 6.2% de 2010.

En el informe también se analizó la tasa de cambio en la puntuación DI de 2010-2020. Los principales condados eran todos comunidades con poblaciones pequeñas, ya que en los condados rurales, escasamente poblados, “se necesitan algunos nuevos residentes no blancos o hispanos para que la tasa de cambio en su DI parezca alta”, escribieron los autores.

Dentro de esta lista, la mitad de los condados se encuentran en Virginia Occidental, uno de los tres estados que experimentaron una disminución de población entre 2010 y 2020. La mayor parte de la pérdida de población se encontró con blancos no hispanos.
“Esto sugiere que en muchos condados, pequeños aumentos en los residentes no blancos o hispanos no son capaces de cancelar las pérdidas entre los blancos no hispanos”, escribieron los autores del estudio. “Estos preocupantes patrones demográficos amenazan la estabilidad económica y social de los condados que dependen de poblaciones crecientes o estables para mantener sus economías locales y su fuerza laboral”.
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